La Mano - Pedro Ortiz

                                                                                             El asesinato misterioso

                                                                La mano

Asesinato misterioso que deja a Francia impactada con este hecho, ya que es inusual que haya un asesinato y más que no se haya encontrado al culpable.

Por: Pedro Ortiz

Según el testigo, el señor Bermutier, conocía a este inglés, era un hombre con el pelo rojo, la barba roja, muy alto, muy ancho y cortés, llamado sir John Rowell, vivía en un pequeño chalet en el fondo del golfo junto con un criado francés, quien fue el primer acusado del asesinato, pero con el tiempo esta idea se descartó.

Según testigos, en la escena del crimen el cadáver estaba extendido boca arriba, en el centro de aquel cuarto. El chaleco estaba desgarrado y colgaba una mano arrancada, todo indica que aquel hombre luchó por su vida. Había muerto estrangulado, su rostro estaba negro e hinchado, pavoroso, sus dientes apretados; y su cuello perforado con cinco agujeros que parecían haber sido hechos con puntas de hierro, estaba cubierto de sangre.

Bermutier, conocía hace casi ya un año a John, ya que le parecía extraño que un inglés viviera allí, lo conoció aún más, consiguió acercarse más a él y hablarle sobre sus pasatiempos, entre los cuales era cazar, unos de sus “trofeos” era una mano, que parecía estar con cadenas, Rowell le contó que esa mano aún no estaba muerta, es por eso que Bermutier, piensa que ha sido ella, ya que la mano no se encuentra donde debería estar, sino que en el cementerio, en el entierro de John.